Se trata de un masaje técnico que, mediante unos precisos movimientos manuales muy suaves e indoloros sobre el tejido conjuntivo, activa el funcionamiento del sistema linfático con el fin de
desplazar la linfa, la cual por diversas patologías se puede encontrar estancada en territorios linfáticos sanos. Después se la acompaña hasta los ganglios para ser depurada y finalmente entrar al
torrente venoso.
La linfa de esta manera avanza hasta un 40% más rápido, debido a estimulación de la contracción de los vasos linfáticos que la transporta.
En definitiva lo que conseguimos con este masaje será activar el sistema linfático y limpiar el organismo de toxinas para mejorar el sistema inmunológico con el que colabora
estrechamente, por lo que el drenaje linfático manual mejora de manera general el estado de salud y ejerce un papel muy beneficioso en el sistema nervisoso.
Es una red de órganos, ganglios y vasos linfáticos que producen y transportan la linfa de los tejidos hasta el torrente sanguíneo. Este sistema es parte principal del sistema inmunitario del
cuerpo.
Los ganglios linfáticos producen células inmunitarias que ayudan al cuerpo a combatir infecciones, al igual que filtran el líquido linfático y eliminan material extraño como bacterias y células
cancerosas.
La linfa es un líquido entre transparente y de color blanquecino, compuesto por:
- células blancas, especialmente linfocitos (células encargadas de atacar a las bacterias en la sangre).
- quilo, líquido proveniente de los intestinos, que contiene proteínas y grasas.
- Contribuye de manera principal a formar y activar el sistema inmunitario para combatir las infecciones.
- Filtrar la sangre.
- Flitrado linfático.
- Controlar la concentración de proteínas en el intersticio, el volumen del líquido intersticial y su presión.
El sistema linfático lucha contra infecciones:
- Ayudando a las células blancas a producir anticuerpos.
- Acumulando otras células sanguineas llamadas macrófagos y destruyendo las partículas extrañas.
Como en cualquier tipo de masaje, existen una serie de contraindicaciones. Entre las más importantes nos encontramos con:
- Infecciones agudas
- Trombosis, flebitis y tromboflebitis.
- Insuficiencia cardiaca
- Varices tortuosas
- Cancer
- Crisis asmática